viernes, abril 15, 2011

Semana Santa en Madrid . Viernes de Dolores


La maestra ha dicho que teníamos que hacer un diario de nuestras vacaciones. ¿Qué vacaciones? si nosotros no nos vamos a ningún lado. Mi padre dice que con la crisis no hay dinero para viajes. Para viajes, no, pero para sus cervezas en el bar, sí.
- ¿Qué quieres? dice.
Y yo no sé para que me dice eso si al final todo le parece caro y termina pidiéndome un vaso de agua.
- !Ponle tapa al muchacho!
Y me sacan unas aceitunas que seguro que están chupadas por alguien antes. Él se pide una doble y se come la alita de pollo sin ofrecerme siquiera.
-!Vete a las pistas que yo voy a buscarte dentro de un rato!
A mi las pistas no me gustan, soy torpe con la pelota y nunca me la pasan. Me largo, busco una farola, saco la play y me olvido de mi padre y de la maestra que se empeña en que siempre pasan cosas que se pueden reflejar en un diario de viajes, que nos pongamos las gafas de turistas y veamos los lugares por los que nos movemos con nuevos ojos. Le he quitado las raiban a mi hermano mayor, la maquina de fotos a mi hermana pequeña, se la regalaron por su comunión pero no sabe como usarla así que no la necesita, además a ella y la han dejado irse al pueblo de su amiga. Aquí el único pringado soy yo, por que mi hermano desde que ha cumplido dieciocho no hay quien le tosa y hace lo que le da la gana. !Al menos el estudia no como tú. ¿Cómo voy a estudiar si están todo el día mandándome recados?
- ¿Dónde se ha metido el gili... ese?
El gili soy yo, claro. Así que salgo corriendo a las pistas y me escondo detrás de un árbol cuando le veo venir salgo como despistado pero no me libro del pescozón en el cogote.
- !Vamos que tu madre debe de estar que trina!
Trinaba, no, graznaba.
- Siempre lo mismo te he dicho que teníamos que darnos prisa que hay que llevarle el regalo a tu madre.
Tu madre es mi abuela. Mi abuela Lola, hoy es viernes de dolores y es su santo.
- Hijo cámbiate la camiseta no vayas con esos monstruos que ya sabes que no le gustan, y tú, vas oliendo a cerveza, mejor que te laves los dientes.
Mi madre dice que mi abuela es una vieja beatona, cuando no la oye papá, y yo en eso estoy de acuerdo, se empeña en llevarme a misa los domingos cuando me quedo en su casa. !Pero si ya no va nadie a misa! Tu has hecho la comunión, entonces vamos. La comunión si pero obligado. Por los regalos querrás decir. Era la única forma de sacar una bicicleta de piñones y un casco. La compraron tan mala que al año estaba ya rota. Cuando saques buenas notas la llevamos a arreglar. Nunca entonces.
- Conduzco yo que tu has bebido.
Ya están discutiendo, pero mi madre siempre se sale con la suya.
Cuando llegamos a Barajas, Barajas no es solo un aeropuerto es un pueblo, el pueblo donde vive mi abuela, el trafico esta cortado. Una procesión.
- !Pues si que empiezan pronto!
Por suerte encontramos un aparcamiento donde dejar el coche y caminamos entre la gente. Seguro que tu madre está en la calle. Me pongo las raiban y saco la máquina de fotos.

Me llamo Tom estoy en Barajas de intercambio, con una familia española de lo mas tipical spanish. Hablan a gritos. Hemos venido a ver las procesiones. La procesión de la Virgen de la Soledad y del Cristo Nazareno. Unos hombres llevan unos estandartes plateados, los santos van rodeados de velas y los llevan en un carro que empujan unos jóvenes. En medio va la banda con los tambores y las cornetas hay un niño que no tendrá ni cinco años pero que sabe marcar el ritmo con su batuta. Huele a incienso y a calamares fritos. Caminamos detrás de las estatuas al ritmo de los tambores. Cuando llegamos a la iglesia meten a la Virgen y al Nazareno allí. Y todos nos vamos a los bares a beber cerveza y comer patatas bravas.

He sacado unas fotos creo que me han quedado medio oscuras pero valdrán para pegarlas en la hoja, Ha dicho que tenemos que ilustrar todo lo que escribamos con cosas que nos recuerden el viaje. o dibujos que nosotros hagamos.
La abuela Lola estaba en la procesión pero nosotros no hemos comido patatas bravas por que la abuela había preparado una merienda en casa. Mucho mejor, ha sacado una bandeja con emparedados de jamón y queso, paté de sardinas, ensaladilla rusa. También ha hecho tortilla de patatas, croquetas y empanadillas de pisto y de postre una tarta de piña y los bombones que había traído mi madre. He comido un montón y casi dos litros de zumo.
- Déjale que está en edad de crecer.
Creo que Tom debería escribir lo bien que se come en España. pero no quiero que venga a casa de mi abuela no quiero que sepan que le he invitado a mi casa. A la vuelta me he dormido en el coche.

2 comentarios:

S. M. L. dijo...

El muchachín ese se las trae, y el tal Tom, ¿existió de verdad?
Un abrazo
D.

radiologia macarena dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.